FISIOTERAPIA RESPIRATORIA

 

La fisioterapia respiratoria es un conjunto de medios terapéuticos físicos (manuales o instrumentales) y educacionales que se aplican al paciente para prevenir, curar y/o estabilizar patologías que afectan al sistema respiratorio, mejorar la función respiratoria del organismo, la calidad de vida y el bienestar físico.


Entre las patologías que se tratan están los procesos que afectan de forma crónica al sistema respiratorio (bronquitis crónica, asma, fibrosis quística, enfermedades neuromusculares), procesos agudos (neumonía, bronquiolitis) o intervenciones quirúrgicas (cirugía cardiaca, pulmonar, abdominal).


La fisioterapia respiratoria, debido a su gran especificidad, debe ser realizada exclusivamente por un fisioterapeuta especializado en el tema.

 

 

OBJETIVOS DE LA FISIOTERAPIA RESPIRATORIA:

 

 

Mejorar la calidad de vida.

 

Favorecer el modelo de respiración normal.

 

Prevenir disfunciones respiratorias.

 

Impedir la acumulación de secreción en la vía aérea.

 

Favorecer el paso de aire por el árbol bronquial y el intercambio gaseoso.

 

Restituir el desarrollo y mantenimiento óptimo de la función pulmonar.

 

Recuperación del normal funcionamiento de la caja torácica y de los músculos respiratorios.

 

Conseguir mayor resistencia a la fatiga muscular.

TÉCNICAS:

 

Las técnicas usadas en fisioterapia respiratoria son en su mayoría sencillas e inocuas técnicas manuales y educacionales, pero también se emplean otras instrumentales (nebulizadores, etc.).

 

LAS PODEMOS CLASIFICAR EN TRES GRANDES GRUPOS:

 

Técnicas de limpieza bronquial
Las usamos cuando hay aumento de secreciones en la vía aérea.
Se utilizan técnicas manuales, la compresión de aire y el control de la respiración activa o pasivamente, (técnicas de espiración lenta, inducción a la tos, espiración forzada…), las presiones y vibraciones, ondas externas de choque y la gravedad.

 

Técnicas de reeducación respiratoria
Son las dedicadas a la recuperación funcional. Se utilizan diversas técnicas: ejercicios de expansión pulmonar, movilización diafragmática, inspirómetro incentivador, etc.

 

Las técnicas de entrenamiento muscular

Ejercicios terapéuticos específicos, tanto para fortalecer la musculatura respiratoria como la musculatura esquelética, para realizar cualquier actividad (desde las más cotidianas hasta deportivas) con la menor fatiga y esfuerzo, consiguiendo así una mejora en la calidad de vida.

INDICACIONES:
 

Enfermedades respiratorias crónicas como bronquitis crónica, enfisema, asma, fibrosis quística, etc.

 

Procesos patológicos en niños (bronquiolitis del lactante, bronquitis, bronquitis silbante, mucoviscidosis, síndrome de inmovilidad ciliar, rinitis, sinusitis, neumonías, asma, etc).

 

– Enfermedades que tengan aumento de secreciones (fibrosis quística, bronquiectasia, etc).

 

Patologías respiratorias agudas (crisis asmáticas, neumonías, etc).

 

Cirugía cardiaca, pulmonar, abdominal. Se realiza fisioterapia respiratoria pre y postoperatoria para facilitar la recuperación y prevenir complicaciones.

 

Enfermedades neurológicas que por su evolución presentan problemas respiratorios (distrofias, esclerosis múltiple, ELA, parálisis cerebral infantil, parkinson, lesión medular, etc.).

 

Trastornos esqueléticos relacionados con el aparato respiratorio o caja torácica (escoliosis, cifosis, …).

 

Pacientes encamados que por su situación suelen tener complicaciones respiratorias.

 

Trastornos de la deglución.

 

Trastornos respiratorios del sueño.

En la actualidad, todas las sociedades médicas de enfermedades pulmonares, como la American Thoracic Society, la European Respiratory Society y la Sociedad Española de Pneumologia y Cirugía Torácica (SEPAR) recomiendan el tratamiento fisioterápico en los pacientes de patología respiratoria